TRES HISTORIAS DE AMOR UNIDAS EN EL TIEMPO POR LA OBRA DE
SANDRO BOTTICELLI Y UN SECRETO QUE PODRÍA CAMBIARLO TODO.
Un apasionante retrato de la Florencia del Renacimiento y de
una de las familias más poderosas que ha existido jamás: los Médici.
Florencia, 1510. En el lecho de muerte, el gran maestro
Sandro Botticelli le pide a su confesor que entregue un mensaje y un cuadro
inédito al hijo de su musa, la hermosa Simonetta Vespucci. Pero el sacerdote no
cumplirá su promesa y el lienzo jamás llegará a su destino.
Barcelona, 2023. Carla, una joven licenciada en Bellas Artes
que trabaja como restauradora, recibe una propuesta para ser subcomisaria en
una exposición sobre Botticelli en la galería de los Uffizi. Después de sufrir
un desengaño amoroso decide marcharse a Florencia, la tierra de su abuela
materna, donde conocerá a un venerable conde italiano y terminará envuelta en
la búsqueda del cuadro perdido. La aventura la llevará a descubrir su verdadera
esencia y un secreto que ha permanecido oculto durante siglos.
Pasión, misterio y fascinación por la belleza se dan cita en
este deslumbrante debut literario que nos acerca a uno de los momentos más
sublimes de la historia del arte.
Desde la primera vez que vi este libro, ya solo con la portada, sabía que tenía que leerlo. Botticcelli es uno de mis pintores favoritos y la ambientación en Florencia sumaba muchos puntos a la historia. Por esto, cuando vi que estaba disponible en Masa Crítica de Babelio, no lo dudé y me lancé de lleno a la historia.
El libro está dividido en tres líneas temporales, aunque guardan relación entre ellas.
En primer lugar, viajaremos hasta 1500 junto a Botticelli, su gran musa: Simonetta y Giuliano Medici. Allí veremos la historia de la mujer detrás de los cuadros, su vida, su amor prohibido...
En segundo lugar, viajaremos hasta Barcelona en 2013, donde Carla decide dejar todo atrás para luchar por su gran sueño: trabajar en los Uffici como restauradora.
Por último, viajaremos a San Gimignano en los años setenta, donde conoceremos a algunos de los personajes en su juventud: Arnaldo, Domenico y Graciela.
El libro gira en torno a un cuadro perdido de Botticelli, pero no es el argumento fundamental de la historia. Aunque sí que existe esta trama, la autora da mucha más importancia a los líos amorosos y profesionales de los protagonistas que a la búsqueda en sí. Esta parte me ha decepcionado un poco, pues soy una amante de las búsquedas y los misterios ocultos y he echado en falta muchas más pistas, leer como se va desentrañando el misterio... La resolución de la historia me ha parecido correcta, aunque era bastante predecible y siento que la protagonista realmente no tiene un papel crucial, sino que se le van dando resueltos la mayoría de elementos.
En cuanto a las historias, he disfrutado especialmente con la narración del siglo XVI, pues nos enseña un poco cómo era la vida en la época, los Medici, la alta sociedad, los pintores... Así como también me ha parecido un romance muy interesante. La autora ha realizado una labor importante de documentación y al final podemos encontrar la biografía que utilizó como inspiración. Esto me ha gustado porque te narra su historia y a la vez te permite seguir investigando sobre los personajes que hay detrás. Además, me ha encantado como va haciendo un repaso de muchos de los cuadros menos conocidos del autor, en los que también aparece su musa.
La ambientación de la historia es inmejorable: Florencia, San Gimignano, la Toscana, Roma..., leer esos lugares siempre te transporta a esas calles tan especiales y te hace ganas de volver allí una y otra vez (o quizá esto sea algo personal mío, pues Italia es mi lugar favorito en el mundo).
También he disfrutado conociendo más sobre el funcionamiento de una de las galerías de arte más importantes del mundo y viendo como funciona el trabajo de un restaurador de arte hoy en día.
He echado en falta un poco más de sorpresa en el cierre de todas las historias, pues me ha resultado todo bastante predecible y en ningún momento he llegado a sorprenderme con los giros argumentales. Aun así, hay que tener en cuenta que es el primer libro de la autora y, viendo como ha conseguido mantenerme enganchada, creo que leeré más libros suyos en un futuro.
En definitiva, Nacida de Venus no es un libro ideal si lo que buscas en un buen misterio. Sin embargo, si quieres perderte en las calles italianas, conocer más sobre Botticelli, los Medici, Simoneta o quieres conocer historias de amor imposible en diferentes épocas, merece la pena darle una oportunidad a la historia.
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