Un libertino sobreprotector. Una osada marisabidilla. Un
matrimonio por conveniencia entre dos opuestos… que se enamoran perdidamente.
¿Una propuesta de matrimonio? ¡Ni en sueños! Esa siempre ha
sido la respuesta de lady Calliope Seaton. Sin embargo, ahora debe conseguir
los documentos navales para rescatar a su hermano Spencer. Y hará lo que sea
necesario para tenerlos en su poder, incluso si eso significa casarse con el
oficial de la marina de mala reputación Nathaniel Fitzgerald, duque de Kelford.
Nathaniel ha estado obsesionado con la osada marisabidilla
desde que intentó deslizarse a hurtadillas en su oficina. Ahora, para reclamar
su herencia, necesita una esposa y un heredero. Por eso, le propone un
matrimonio de conveniencia. Mudarse a la mansión en decadencia en Mayfair de
Nathaniel y hacerse cargo de las tres hermanas sin modales sería un desafío
hasta para la novia más valiente. Pero al cabo de poco tiempo, Calliope repara
el hogar, se gana el cariño de sus hermanas y reclama su corazón.
Cuando se enamora de su esposa aventurera, una chispa
protectora se enciende en Nathaniel. En especial cuando descubre que podría
haber un niño en camino… y un amenazador desconocido envía agresores con armas
blancas.
Calliope jamás permitirá que nadie la encierre en una jaula,
y Nathaliel intenta mantenerla a salvo, se está convirtiendo en el tirano que
tanto detesta. ¿Será que sus diferencias acabarán por destruirlos o podrá el
amor derrotar al temor?
En este tercer libro, acompañamos a la única chica del clan Seaton: Calliope.
Sus hermanos han decidido que ya va siendo hora de que la pequeña de la familia siente la cabeza y se case, aunque ella no está de acuerdo. Sin embargo, cuando William King, el hombre que conoce su más oscuro secreto, muestra interés en el matrimonio con ella. Calliope tiene que elaborar un plan de emergencia para rehuir los planes de sus hermanos y mantener su libertad.
Nathaniel, el duque de Kelford, no tiene precisamente una buena reputación. Es, entre otras cosas, el duque más pobre de toda Inglaterra (aunque podría recuperar su cuantiosa fortuna si se casa y tiene un hijo en menos de un año).
Así, Calliope y Nathaniel pactan un matrimonio de conveniencia. Los dos darán al otro aquello que necesita y después tendrán libertad para cumplir con todos sus objetivos. ¿El único problema? Si el amor llega a entrar dentro de la ecuación, todo se tornará mucho más complicado.
Calliope es un personaje muy interesante, sus intereses son muy diferentes a los del resto de ladies de la alta sociedad. Ella no está demasiado interesada en vestidos y bailes, quiere ser investigadora privada y dedicarse a resolver misterios. Además, es una ávida lectora y sus intereses van mucho más allá de lo que se puede hablar en un salón de baile. Es una chica muy inteligente y valiente, aunque también es tremendamente impulsiva y alocada que no sabe medir bien las consecuencias de sus actos.
En cuanto a Nathaniel, he disfrutado con su historia, el modo en que protege a sus hermanas y a su esposa, aunque en más de una ocasión me ha sacado de quicio con su excesiva sobreprotección y su obstinación con ciertos temas.
La historia de amor es muy bonita y me gustaría saber más sobre el futuro de esta peculiar pareja. Además, en este libro sabemos un poco más sobre qué fue de Spencer y lo que realmente ocurrió aquella noche.
Mi puntuación:
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