Reseña infantil: ¡Fergal echa humo! - Robert Starling

Título: ¡Fergal echa humo!
Autor: Robert Starling
Ilustrador: Robert Starling
Traductora: Raquel Mosquera
Editorial: Picarona
Páginas: 32
Precio: 12€
Edad recomendada: A partir de dos años

Un dragón con temperamento explosivo no es una buena combinación, como la familia y los amigos de Fergal descubrieron muy pronto. Quema la cena (literalmente), reduce a cenizas la portería del equipo de fútbol y no puede disfrutar de un juego de mesa agradable  y tranquilo. Sólo cuando empieza a notar que otros animales tienen trucos inteligentes para calmarse, Fergal comienza a tomar el control de su genio y a recuperar a sus amigos; especialmente cuando descubre que los dragones pueden calmarse de una manera muy fácil.

¿Alguna te has enfadado tanto que has querido destrozar todo lo que había a tu alcance mientras expulsabas aire furiosamente por la nariz? Seguro que te ha pasado en más de una ocasión... 

Ahora imagina que en lugar de ser un ser humano eres un dragón capaz de arrojar fuego. ¿La cosa se complica, verdad? Pues esto es precisamente lo que le ocurre a Fergal, un pequeño dragón que suele enfurecerse con facilidad...

Nada más observar el libro ya podemos ver las consecuencias de su furia. Un enorme agujero calcinado nos da la bienvenida a la historia dejando ver a un pequeño dragón avergonzado por lo que acaba de hacer.

Fergal suele enfurecerse con facilidad y calcina todo lo que está a su alcance. Ya sea por no comerse la verdura, por tener que esperar o simplemente porque las cosas no salen como él quiere.

   

Sin embargo, su furia parece tener una consecuencia terrible: sus amigos ya no quieren estar cerca de él por miedo a perder todas sus posesiones...

Fergal acaba desolado y pide consejo a su mamá que le enseñará a canalizar su furia y a aprovechar su fuego en otras actividades...

El cuento comienza de manera muy divertida ya que acompañamos a Fergal en todo sus destrozos. Sin embargo, llega un momento en el que nos hace reflexionar y nos muestra como la furia hace que dañemos a las personas a nuestro alrededor. Así como también las consecuencias que pueden acarrear este tipo de comportamientos. Creo que es muy interesante ya que invita a los niños a la reflexión y, a su vez, les da herramientas para poder canalizar su propia frustración.

Personalmente, he utilizado este libro con los peques sobre todo para reflexionar sobre la emoción de estar enfadado. Pero, además hemos aprendido de los errores de Fergal y ahora, cuando un niño se enfada y empuja o lanza los juguetes nos paramos a pensar en qué podemos hacer para superar esa furia (Teniendo en cuenta que son niños muy pequeños no suele funcionar...). Pero creo que es importante sentar las bases para que poco a poco vayan pensando antes de actuar y aprendan a canalizar sus emociones.

Es un libro que recomiendo mucho, especialmente para los peques más impulsivos por el modo en que está planteada la historia. Realmente en ningún momento se culpabiliza al dragón o se le encasilla en el papel de "malo" sino que el personaje, con ayuda de su mamá, reflexiona sobre su conducta y busca maneras para poder superarla.

Gracias a la editorial Picarona por el envío del ejemplar