Wendy Watts debe vender la posada costera que heredó pero,
cuando besa de forma espontánea al atractivo desconocido Max Huntington,
comienza a preguntarse si la leyenda local podría ser cierta: ser besado junto
a la bahía bajo una luna azul conduciría al amor que dura para siempre.
Cuando Wendy Watts dejó la bahía de la Luna Azul juró que
nunca más volvería a la pequeña ciudad costera donde sus padres la habían
abandonado junto a su hermano. Ahora era una agente inmobiliaria de gran éxito
y una adicta al trabajo, algo que la mantuvo alejada de complicadas emociones
hasta que su abuela murió, dejando a Wendy la posada en la bahía de la Luna
Azul y ordenando que la vendiera, siendo la misma Wendy “en persona” la que la
pusiera en el mercado.
Tan pronto como llegó a la bahía de la Luna Azul, los malos
recuerdos, el mal estado de la posada y las súplicas de su hermano para salvar
la misma le abrumaron. Es entonces cuando conoce a un tranquilo y sexy extraño
en la playa… y Wendy hace algo que nunca hace: se sincera y le confía sus
problemas. Dado que Max Huntington sólo va a pasar una noche en la ciudad,
Wendy lo besa de forma espontánea con la esperanza de distraerse de sus
problemas sólo por una noche.
Pero cuando Wendy comienza el laborioso proceso de reforma
de la posada con el fin de venderla, Max le dice que se queda más tiempo. Él
está encantado con la posada con encanto y más aún con los besos que comparten
en la playa. Quiere ayudarla con las reparaciones y ella de mala gana acepta su
oferta.
A pesar de que Wendy está decidida a permanecer al margen
del atractivo de su posada, la bahía de la Luna Azul y sobretodo Max, cada
reparación, cada paseo en la playa y cada momento que pasa con Max, le dibuja y
le recuerda la leyenda local que había creído cuando era niña: que ser besado
por la bahía bajo una luna azul conduciría al amor que dura para siempre.
La posada de las segundas oportunidades es el primer libro que leo dentro de la colaboración con la
colección amor de la que ya os hablé anteriormente. Aunque forma parte de una serie, esta está compuesta por libros autoconclusivos con diferentes protagonistas por lo que puede leerse de manera completamente independiente.
En la historia conoceremos a Wendy, una agente inmobiliaria consolidada en Sacramento cuyo objetivo en la vida es seguir triunfando en su profesión y conseguir la casa de sus sueños cuando salga a la venta próximamente. Sin embargo, la muerte de su abuela pone su vida patas arriba cuando tiene que volver para cumplir su última voluntad: reformar la posada en la que pasó su infancia y venderla.
Allí, Wendy tendrá que reencontrarse con su pasado y con todo aquello de lo que huyó hace años sin mirar atrás. Así veremos como poco a poco descubre que su vida en Bahía de la Luna Azul no era tan horrible como pensaba y que ese lugar tiene algo especial.
El personaje de Wendy refleja muy bien la ambivalencia de las decisiones humanas y el modo somos capaces de tolerar en nosotros mismos todo aquello que odiamos en los demás. Ella está profundamente enfadada con sus padres por abandonarla de pequeña para irse a vivir su vida, sin embargo, es lo mismo que hizo ella con su abuela y su hermano pero no ve problema con ello.
La historia de amor del libro gira en torno a una leyenda: Un beso en la bahía bajo la luna azul hará que esas dos personas se enamoren y que su amor sea eterno. Esta parte me ha gustado ya que soy una soñadora y me gustan mucho las leyendas y toda la magia que se forma en torno a ella.
En cuanto a la historia de amor en sí, me ha parecido bonita aunque para mí le ha faltado mucha profundidad pues considero que en la historia tienen mucho más peso las historias familiares o la propia venta de la posada que la historia de amor.
Con respecto al personaje masculino, Max, es un hombre amable, divertido, servicial, romántico y absolutamente perfecto. Tal vez esta perfección ha sido precisamente mi problema a la hora de interiorizar la historia. Sentía que Max era más una idealización o una ilusión que una persona real. Esto ha hecho que me haya sido imposible enamorarme de él o que quiera saber mucho más sobre su futuro (aunque doy por hecho que su futuro será también perfecto).
Otra parte que también tiene mucho protagonismo en la historia es el Festival de la Calabaza, una tradición local que nos invita a reflexionar sobre el eterno debate sobre conservar las tradiciones tal y como están o adecuarlas a los tiempos aunque pierdan parte de su esencia.
En definitiva, Bahía de la luna azul es una historia entretenida si te apetece leer un poco de romance entre lecturas, pero me ha faltado un poco más de profundidad en la historia y un personaje masculino un poco más real, con sus defectos y sus errores. Mi puntuación:
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